DIA 25: RECUERDA

¡Felicitaciones, usted ha llegado oficialmente al último día de After Salvation! Quiero agradecerle enormemente por confiarme su valioso tiempo. Por favor, tenga en cuenta que he orado por usted anticipadamente, para que Dios le haga crecer y lo moldee más a Su imagen diariamente. Hoy quiero compartir algunas cosas personales de mi proceso, que espero que le sean útiles, mientras continúa su camino con Dios. El compromiso con Dios no es un camino fácil y las escrituras nos recuerdan lo difícil que es seguirle.

Mateo 7:13-14 “Entren por la puerta estrecha. Porque es ancha la puerta y espacioso el camino que conduce a la destrucción, y muchos entran por ella. Pero estrecha es la puerta y angosto el camino que conduce a la vida, y son pocos los que la encuentran”.

Ya llegó al día 25, lo cual habla de su nivel de compromiso con Dios; creo que eso es fantástico. Como me ha oído decir durante este proceso juntos, no existen atajos para la madurez espiritual. El crecimiento requiere esfuerzo. Seguir a Dios no es fácil porque el mundo y la carne están constantemente tratando de obtener su atención e interés. Es por eso que quiero cerrar nuestro estudio acerca del compromiso, compartiendo algunas cosas importantes.

Temporadas

¡Así es la vida! Tendrá tiempos buenos y tiempos malos, como todo el mundo. Eclesiastés 3:1 dice, "Todo tiene su momento oportuno; hay tiempo para todo lo que se hace bajo el cielo". Esto se refiere a la vida y básicamente está diciendo que van a suceder cosas y que no debemos sorprendernos cuando eso pase. Tenga cuidado y no permita que esas dificultades de la vida lo alejen de Dios. Hebreos 6:19 dice, "Tenemos como firme y segura ancla del alma..." Jesús es nuestro ancla y jamás nos prometió una vida sin dificultades. Él nos dice que habrá problemas, pero que tenemos buenas noticias al saber lo que dice Juan 16:33: "Yo les he dicho estas cosas para que en mí hallen paz. En este mundo afrontarán aflicciones, pero ¡anímense! Yo he vencido al mundo”.

Creo que un aspecto importante para nosotros como seres humanos, es considerar que no podemos controlar todos los eventos y circunstancias. Lo que podemos controlar es permanecer conectados y comprometidos con Dios, dependiendo del Espíritu Santo para que nos ayude y nos fortalezca. He pasado por una temporada muy difícil en mi vida y puedo dar testimonio de esto. Estos momentos nos afectan en una de dos maneras: Nos impulsan a tener mayor fe en Dios o nos alejan de Él. Mentalmente tenemos que estar preparados para cualquier cosa, pero no debemos pensar demasiado en “lo que podría pasar”, porque eso lleva a la ansiedad. Dios quiere que sepa que no importa lo que enfrente, ni siquiera la muerte misma. Él ya venció todo eso, por eso anímese, nuestra esperanza no está en este mundo, sino en nuestro destino eterno.

No Apagar al Espíritu Santo

En 1 Tesalonicenses 5:19 dice, "No apaguen el Espíritu". Esta es probablemente una de las cosas más difíciles para el cristiano comprometido. ¿Cómo sabemos que no estamos apagando al Espíritu Santo en nuestras vidas? La tensión viene cuando los creyentes entran en un desequilibrio en sus vidas espirituales. Apagar al Espíritu significa que dejamos de oír la corrección y dirección del Espíritu Santo en nuestras vidas. La pregunta es: Si el Espíritu Santo no está dirigiendo nuestras vidas, entonces ¿quién lo está haciendo?

Eso significa que entonces nuestra carne nos está dirigiendo y el peligro es que esto nos alejará más y más de Dios y nos afectará en nuestro propósito y comprensión de Su voluntad para nuestras vidas. Esto nos lleva de regreso al Día 24, cuando discutimos cómo la conciencia espiritual nos ayuda a desarrollar madurez en nuestras vidas. Sea fiel y esté consciente de la dirección del Espíritu Santo. No ahogue la voz de Dios en su vida; ¡el Espíritu es su abogado y ayudador!

Otras veces ponemos demasiado énfasis en un área de nuestra vida y descuidamos al Espíritu Santo. Por ejemplo, el trasfondo en el cual fui criado, creaba un ambiente en el que la Palabra de Dios era elevada a un lugar donde parecía tomar precedencia por sobre el Espíritu Santo. Rara vez se hablaba del Espíritu Santo dentro de los servicios. Por favor no malentienda lo que digo; hay un valor incalculable en conocer la Palabra de Dios y es lo que nos forma como creyentes. Espero que durante los últimos 25 días haya recibido una buena instrucción en la Palabra, pero también debemos ser obedientes a la dirección del Espíritu Santo en nuestras vidas. En Juan 4 se describe este equilibrio; Jesús usa las palabras “Espíritu” y “Verdad”.

Juan 4:23-24 “Pero se acerca la hora, y ha llegado ya, en que los verdaderos adoradores rendirán culto al Padre en espíritu y en verdad, porque así quiere el Padre que sean los que le adoren. Dios es espíritu y quienes lo adoran deben hacerlo en espíritu y en verdad”.

Entonces adoramos a Dios en Espíritu (Espíritu Santo) y en verdad (Biblia/Palabra de Dios). El creyente necesita ambos para tener éxito y crecimiento espiritual. Le animo a aprender a oír la voz de Dios por medio de Su Palabra y de Su Espíritu. Recuerde, el Espíritu Santo es parte de la Trinidad, por lo que no descuide esta parte de su vida espiritual. Debemos poner atención al pasaje bíblico donde Jesús dijo que era mejor que Él se fuera, para que el Padre pudiera mandar al Espíritu Santo, nuestro ayudador. (Juan 14:25-27)

Sus Emociones No Son Dios

Finalmente, todos luchamos con nuestras emociones. Algunos lo demostramos más que otros, pero todos lo hacemos. Específicamente cuando hay momentos difíciles o cuando las cosas no salen como queremos, todos parecemos frustrarnos emocionalmente. Es importante que aprendamos a separar nuestras emociones. Si está teniendo un mal día, eso no significa que Dios está enojado con usted. El hecho de que no le agrade su trabajo o no está en el rol en que quiere estar, no significa que Dios le está reteniendo porque no tiene suficiente fe. En Hebreos 13:8 dice, "Jesucristo es el mismo ayer, hoy y por siempre”. Es importante reconocerlo, porque lo que sentimos no es lo que Dios siente respecto a nosotros.

He hablado con personas que dicen que no han leído su Biblia un día y su día ha sido horrible, y por lo tanto, “Dios debe estar enojado conmigo”. Muchas veces es el error de nuestras expectativas internas, expresadas por una circunstancia externa no relacionada. Dios no está enojado con nosotros porque no pudimos leer nuestra Biblia un día. ¿Qué hacían los discípulos antes que se inventara la imprenta en los años 1400? No había Biblias de bolsillo para llevarlas a todos lados; dependían del Espíritu Santo y se instruían en las Escrituras lo más que podían, a través de las reuniones en el templo y en las casas. Además, compartían las cartas de los discípulos, las cuales ahora llamamos Nuevo Testamento.

Si nos sentimos así, lo que experimentamos es culpa que nos convence que necesitamos hacer cosas para obtener el amor de Dios y su favor, lo cual simplemente es una forma incorrecta de ver a Dios. ¿Debemos leer nuestras Biblias?

¡Por supuesto que sí! Pero tenga cuidado de no convertirse en lo que yo llamo “la balanza de lo bueno y lo malo”. Es la idea de que si hace suficientes cosas buenas para Dios, le amará más y si no participa en suficientes actividades religiosas, Él estará enojado y decepcionado de usted.

Dios no funciona de esa manera. Él opera en su gracia y consistencia. Él es un Dios justo y conoce la intención de su corazón. Dios dice en Deuteronomio 32:4, "Él es la Roca, sus obras son perfectas, y todos sus caminos son justos. Dios es fiel; no practica la injusticia. Él es recto y justo”. Luego, en Salmos 139:2-3 dice, "Sabes cuándo me siento y cuándo me levanto; aun a la distancia me lees el pensamiento. Mis trajines y descansos los conoces; todos mis caminos te son familiares". El amor de Dios por usted no cambia según su estado emocional. Él es el aspecto más consistente en su vida, porque no cambia. Su estado emocional no afectará el amor de Dios por usted, ni su salvación. ¡Usted está seguro en Cristo!

VERSOS DEL DIA

1 Tesalonicenses 5:19
"No apaguen el Espíritu",
 

Hebreos 13:8
"Jesucristo es el mismo ayer, hoy y por siempre".

LAS PREGUNTAS DE HOY

RECURSOS ADICIONALES

Book - The Spirit of the Disciplines - Dallas Willard : Clic Aquí