DIA 7: JESÚS
Para continuar trabajando en nuestra relación con Dios en el Día 7, debemos comprender más acerca de nuestro salvador Jesucristo. Desde el principio, Dios planeó restaurar a la humanidad. Es importante comprender que no podemos reunirnos con Dios Padre sin Jesús. Tampoco podemos tener acceso al Espíritu Santo sin Jesús. Y por último, no podemos tener vida eterna sin Jesús. Sin Cristo es imposible mantener unida nuestra fe; ¡Él es las “Buenas Noticias” que establecen el concepto de esperanza y redención para toda la humanidad, por medio de su amor y sacrificio en la cruz!
Para comenzar a profundizar en nuestro conocimiento de Jesús, ¿qué debemos saber acerca de Él?
Para comenzar a profundizar en nuestro conocimiento de Jesús, ¿qué debemos saber acerca de Él?
Jesús existió desde el principio del tiempo.
Juan 1:1-18, Juan 8:58, Génesis 1:26
Entender que Jesús existió antes que el mundo comenzara es importante, porque establece su naturaleza eterna y su autoridad divina. Significa que Jesús no es sólo un ser humano, sino parte de un Dios eterno (Padre, Hijo y Espíritu Santo), que jugó un rol central en la creación del universo. Esto nos da una comprensión de la naturaleza de Dios y el significado de la misión de redimir a la humanidad del pecado y de la muerte.
Entender que Jesús existió antes que el mundo comenzara es importante, porque establece su naturaleza eterna y su autoridad divina. Significa que Jesús no es sólo un ser humano, sino parte de un Dios eterno (Padre, Hijo y Espíritu Santo), que jugó un rol central en la creación del universo. Esto nos da una comprensión de la naturaleza de Dios y el significado de la misión de redimir a la humanidad del pecado y de la muerte.
Se profetizó acerca de Jesús en todo el Antiguo Testamento.
Isaías 53, Isaías 7:14, Miqueas 5:2
Las profecías acerca de Jesús en el Antiguo Testamento, son importantes porque proveen evidencia del plan divino de salvación, que se extiende a través de toda la historia del ser humano. Demuestra que el Jesús que vendría no era una idea adicional, o una ocurrencia fortuita, sino el cumplimiento de las promesas de Dios y
parte de su plan mayor de redención. Además ayudan a establecer la credibilidad de Jesús como Mesías.
Las profecías acerca de Jesús en el Antiguo Testamento, son importantes porque proveen evidencia del plan divino de salvación, que se extiende a través de toda la historia del ser humano. Demuestra que el Jesús que vendría no era una idea adicional, o una ocurrencia fortuita, sino el cumplimiento de las promesas de Dios y
parte de su plan mayor de redención. Además ayudan a establecer la credibilidad de Jesús como Mesías.
Jesús tuvo un nacimiento virginal.
Isaías 7:14, Mateo 1:18–25
El nacimiento virginal de Jesús fue un evento milagroso que lo separa de todos los seres humanos. Afirma su divinidad y establece su rol único como el Hijo de Dios, que vino a la tierra a salvar a la humanidad del pecado y de la muerte. Además cumple la profecía escrita en Isaías 7:14.
El nacimiento virginal de Jesús fue un evento milagroso que lo separa de todos los seres humanos. Afirma su divinidad y establece su rol único como el Hijo de Dios, que vino a la tierra a salvar a la humanidad del pecado y de la muerte. Además cumple la profecía escrita en Isaías 7:14.
Jesus fue 100% Hombre y 100% Dios
1 Timoteo 2:5, Juan 10:30, Colosenses 2:9
La naturaleza dual de Jesús demuestra el amor y la gracia de Dios hacia la humanidad. Al tomar la forma de hombre, Jesús se identifica con nosotros en nuestro sufrimiento y nos muestra la profundidad del amor de Dios, al sacrificarse voluntariamente por nuestra salvación. Con la humanidad de Jesús, también establece un ejemplo de cómo debemos vivir en la tierra.
La naturaleza dual de Jesús demuestra el amor y la gracia de Dios hacia la humanidad. Al tomar la forma de hombre, Jesús se identifica con nosotros en nuestro sufrimiento y nos muestra la profundidad del amor de Dios, al sacrificarse voluntariamente por nuestra salvación. Con la humanidad de Jesús, también establece un ejemplo de cómo debemos vivir en la tierra.
Jesús vivió una vida sin pecado.
1 Juan 3:5, 1 Pedro 2:22
La importancia de la vida sin pecado de Jesús, es una prueba de su divinidad. Su vida exenta de pecado también creó un “sacrificio perfecto”. Esto también anima a los creyentes a seguir el ejemplo de vida de Jesús. Aunque no podemos ser perfectos, nuestra nueva vida desarrolla un deseo de resistirnos al pecado. Romanos 6:6.
La importancia de la vida sin pecado de Jesús, es una prueba de su divinidad. Su vida exenta de pecado también creó un “sacrificio perfecto”. Esto también anima a los creyentes a seguir el ejemplo de vida de Jesús. Aunque no podemos ser perfectos, nuestra nueva vida desarrolla un deseo de resistirnos al pecado. Romanos 6:6.
Jesús fue el sacrificio perfecto para reconciliarnos con Dios para siempre.
Hebreos 10:1-18, Hebreos 9:11-14
Debido a la naturaleza caída del hombre, los sacrificios eran necesarios para cubrir los pecados de las personas. Desde el principio, leemos en el Antiguo Testamento, que se usaban sacrificios de animales para cubrir temporalmente los pecados del pueblo de Dios y reconciliarlos con Él. En el Antiguo Testamento, vemos que ¡Dios ya tenía el plan de enviar un salvador (Jesús) para reconciliarnos con Dios para siempre!
Debido a la naturaleza caída del hombre, los sacrificios eran necesarios para cubrir los pecados de las personas. Desde el principio, leemos en el Antiguo Testamento, que se usaban sacrificios de animales para cubrir temporalmente los pecados del pueblo de Dios y reconciliarlos con Él. En el Antiguo Testamento, vemos que ¡Dios ya tenía el plan de enviar un salvador (Jesús) para reconciliarnos con Dios para siempre!
Jesús conquistó la muerte.
Romanos 1:4, Lucas 23:46, Lucas 24:1-35
Jesús murió en su estado humano, pero 3 días después se levantó de la tumba. En Lucas 23 podemos ver evidencia de Jesús dando su último aliento de vida y muy poco después vemos que se levantó de la tumba. Cuando Jesús conquistó la muerte, probó
su divinidad (Él es Dios). Esto también nos anima, porque si Jesús conquistó la muerte, entonces ¿por qué deberíamos temer si Jesús vive en nuestras vidas? No hay nada que temer, ni siquiera la muerte, porque estamos en Él. Ahora estamos seguros en nuestra vida eterna por medio de Cristo. 1 Corintios 15:55-56.
Jesús murió en su estado humano, pero 3 días después se levantó de la tumba. En Lucas 23 podemos ver evidencia de Jesús dando su último aliento de vida y muy poco después vemos que se levantó de la tumba. Cuando Jesús conquistó la muerte, probó
su divinidad (Él es Dios). Esto también nos anima, porque si Jesús conquistó la muerte, entonces ¿por qué deberíamos temer si Jesús vive en nuestras vidas? No hay nada que temer, ni siquiera la muerte, porque estamos en Él. Ahora estamos seguros en nuestra vida eterna por medio de Cristo. 1 Corintios 15:55-56.
Jesus no sólo fue visto por sus discípulos después de su resurrección, sino que
también por más de 500 personas.
Lucas 24:36-49, 1 Corintios 15:6
Algunos escépticos dicen que Jesús fingió su muerte o que robaron su cuerpo y lo escondieron para decir que había resucitado. Probablemente haya oído a escépticos decir que “por supuesto” que los seguidores de Jesús dijeron que lo vieron, pero es totalmente distinto cuando más de 500 individuos vieron a Jesús resucitado. Al crecer en nuestra fe, comprendemos que no es simplemente una historia bonita; Jesús realmente resucitó y mucha gente lo vio. Incluso documentación no bíblica también relata estos eventos. Esto debería crear una mayor confianza en nuestra fe y en quién es Jesús.
Algunos escépticos dicen que Jesús fingió su muerte o que robaron su cuerpo y lo escondieron para decir que había resucitado. Probablemente haya oído a escépticos decir que “por supuesto” que los seguidores de Jesús dijeron que lo vieron, pero es totalmente distinto cuando más de 500 individuos vieron a Jesús resucitado. Al crecer en nuestra fe, comprendemos que no es simplemente una historia bonita; Jesús realmente resucitó y mucha gente lo vio. Incluso documentación no bíblica también relata estos eventos. Esto debería crear una mayor confianza en nuestra fe y en quién es Jesús.
Jesús es el único camino a Dios.
Juan 14:6, Hechos 4:12
Es importante entender que Jesucristo es el único camino a la vida reconciliada con Dios. No hay obras que podamos hacer para ganar nuestro camino al cielo. No hay religión o prácticas espirituales disponibles para rescatarnos del pecado y de la separación eterna de Dios; Jesús es el único camino. Tenga cuidado con el mundo que lo rodea, porque tratará de convencerlo de que hay otras maneras, pero no es verdad, porque Juan 14:6 lo dice.
Es importante entender que Jesucristo es el único camino a la vida reconciliada con Dios. No hay obras que podamos hacer para ganar nuestro camino al cielo. No hay religión o prácticas espirituales disponibles para rescatarnos del pecado y de la separación eterna de Dios; Jesús es el único camino. Tenga cuidado con el mundo que lo rodea, porque tratará de convencerlo de que hay otras maneras, pero no es verdad, porque Juan 14:6 lo dice.